En primer lugar quiero comentar que en la mayoría de aspectos técnicos y argumentales hay un gran respeto por la trilogía original. De hecho el argumento de la película se parece muchas veces más a un reboot del episodio IV que a una nueva entrega de la saga. Los guiños a los fans son constantes. No obstante, creo que los problemas argumentales son varios: en algunos momentos la película es muy previsible, el dúo de protagonistas tienen menos carisma que los personajes de las películas originales y la resolución de algunas situaciones es difícilmente asumible si no dejas el cerebro en casa. Eso sin hablar del "villano", un ser con menos carisma que una piedra que palidece en comparación con cualquier otro malo de la saga.
Quizás en el apartado técnico es donde resida el fuerte de este largometraje. Como he comentado antes, en los aspectos técnicos se aprecia un espíritu continuista por parte del director, que ha querido establecer una estrecha conexión con la estética y el sonido de la trilogía clásica. A diferencia de las precuelas está película no abusa tanto del CGI. Hay efectos especiales, sí, pero no se emplean para todo. En cuanto a la banda sonora, hay que decir que parece sacada de cualquiera de los capítulos clásicos, los temas nuevos encajan y los temas clásicos sufren algunas variaciones que no desentonan. El sonido de explosiones, disparos y sablazos también está a gran nivel, como era de esperar en la franquicia.
En definitiva, la película tiene fallos pero creo que los seguidores saldrán bastante contentos de las salas de cine. ¡Que la fuerza os acompañe!
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